En una sociedad con una población que mayoritariamente supera los 60 años de edad, no es de extrañar que surjan movimientos que reivindiquen nuevas fórmulas de viviendas. Una de ellas es precisamente lo que se denomina cohousing, que en Bilbao reivindican desde hace años colectivos de personas mayores. No es fácil satisfacer esta petición con suelo público, según explican desde las áreas de Vivienda tanto del Gobierno vasco como del Ayuntamiento de Bilbao, pero sí han anunciado que en Zorrotzaurre está prevista la construcción de una promoción de vivienda en cooperativa para mayores en suelo público y en régimen de alquiler. El primer paso en Euskadi se ha dado en Donostia, en lo que se denomina Txomin Enea, una prueba piloto cuyos resultados serán fundamentales para avanzar en este tipo de vivienda.
Desde hace años ciudadanos particulares solicitan al concejal de Vivienda del Ayuntamiento de Bilbao, Goyo Zurro, la cesión de suelo público para construir viviendas por su cuenta en régimen de cooperativa y poder vivir en comunidad. Es lo que se conoce en Europa como cohousing, que ha empezado a despertar un gran interés en Euskadi.
En el último pleno municipal fue la asociación Egunsentia, formada por alrededor de sesenta personas que ya manifestaron hace tres años en este periódico su interés por constituir la primera comunidad de viviendas para jubilados en régimen de cooperativa de Bizkaia, la que buscó el apoyo de la corporación para impulsar una promoción de la coviviencia para mayores. María Asunción Fernández Ostolaza, en representación de la asociación, defendió las virtudes de impulsar una vivienda colaborativa sénior o intergeneracional que, según dijo, “tendrá efectos sociales, sanitarios y medioambientales de interés para Bilbao”.
En definitiva se trata de superar los tradicionales modelos de tenencia -alquiler o compra- por esta modalidad de la cesión de uso. La cooperativa adjudicataria es la titular del derecho de superficie y es la propietaria de la edificación. La administración pública mantiene la titularidad del suelo e ingresa un precio por esa cesión que se fija en el concurso. Las personas socias acceden a la cesión de uso de la vivienda con una aportación inicial y una renta mensual. Dependiendo de los lugares y las zonas de las ciudades donde estén ubicadas, las cantidades pueden oscilar entre 15.000 y 20.000 euros para la aportación inicial y entre 500 y 700 euros de una renta mensual que sirve para la amortización del préstamo, la conservación y el mantenimiento de la edificación y las inversiones y actividades propias de la comunidad.
Para más información: https://m.deia.eus/2019/02/18/bizkaia/bilbao/zorrotzaurre-tendra-viviendas-de-cohousing-en-regimen-de-alquiler